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Los festejos populares taurinos son todos aquellos que se celebran con toros y en los que participa la gente de una manera u otra en función de su modalidad o zona geográfica. España es el país con más diversidad de modalidades taurinas que existe en el mundo y el que más festejos populares realiza. Cada Comunidad tiene un reglamento que controla sus propias tradiciones. 

En la actualidad se celebran en España más de 30.000 espectáculos de festejos populares que mueven más de 100.000 reses, limpias y de alquiler, frente a los apenas 2.000 de corridas de toros, rejones, novilladas y becerradas consideradas como lidia ordinaria. Los populares mueven al año más de 500 millones de euros.

El encierro

La modalidad más antigua de todas es el encierro. Este comenzó durante la época prehistórica, cuando nuestros antepasados conducían las reses en manada hacia desfiladeros o barrancos para después encerrarlos allí, y así poder disponer de ellos cuando los necesitaran. 

Los toros, normalmente eran llevados a pie desde las ganaderías hasta prados cercanos a la localidad del festejo. La noche anterior o la misma mañana de la fiesta eran trasladados a la plaza de toros. Luego vinieron los trenes y los camiones y este acto fue desapareciendo en la gran mayoría de las poblaciones excepto en algunas como Pamplona o San Sebastián de los Reyes, donde el encierro fue convirtiéndose poco a poco en el espectáculo que hoy conocemos.

Toro de cuerda

 

Esta es la suerte popular taurina más ancestral de todas, ya que ha sido durante siglos la principal manera de correr a los toros por los pueblos con seguridad, ya que al estar atado el animal no se escapaba, se podía pasear por todas las calles, y en caso de percance se le retenía rápidamente. Este festejo se realiza en prácticamente todas la comunidades españolas.

Toro de cuerda, es el nombre común, que representa las diversas formas en que se denomina esta modalidad de suelta de reses, en los diferentes municipios y ciudades del territorio español donde se celebran, así, en el País Vasco, se llama Sokamuturra, y en otros lugares: toro ensogado, toro enmaromado, torito de la cuerda, toro de soga, etc.

En España, se celebran actualmente en 33 municipios del País Vasco, 14 de Andalucía, 12 de Aragón, 11 de la Comunidad Valenciana, 8 de Castilla y León, 6 de Cataluña, 4 de La Rioja, 4 de Castilla-La Mancha, 3 de Navarra, así como en dos localidades de Galicia y Baleares. Sumando cerca de los 100 municipios, aunque se realiza también en otros de forma ocasional. De todos estos pueblos, destaca Beas de Segura y Arroyo del Ojanco ya que en solo dos días sueltan más de un centenar de toros.

 

Toro de fuego

 

Esta modalidad, sólo se realiza en el mundo en algunos lugares de España y en Mira, Ecuador. Aunque existen indicios que se realizaban toros con fuego en sus cuernos en la época griega, lo más documentado basa su procedencia en las Guerras Púnicas, cuando los cartagineses fueron derrotados en España por los Oretanos. Para ello emplearon cientos de toros y bueyes a los cuales les colocaron sobre sus cabezas yugos con hatillos de leña untada de brea y alquitrán a la cual prendieron fuego, espantando después las manadas contra el campamento enemigo. 

Desde entonces, desde hace más de 2.000 años, los toros de fuego se han venido realizando sin interrupción en las noches de fiesta en muchas regiones de España. En principio se encendían antorchas sobre unas fundas vacías, similar a como se hace en Ecuador, y se les ataban a los pitones del toro. Posteriormente, la técnica se fue mejorando hasta los aparatos presentes. En algún sitios utilizan el yuguete. En algunos lugares de Aragón todavía se le unta barro en la cara y la piel del toro para emular el toro de fuego antiguo.

Además del bou embolat en la Comunidad Valenciana, una de las fiestas más populares y antiguas del toro de fuego es el Toro Jubilo, de Medinaceli, en Soria.

 

Bous a la mar

 

Esta es una forma de festejo popular que lleva realizándose en muchos pueblos costeros del Mediterráneo, o el Cantábrico. Suele ser un recinto con una parte abierta al mar, y se trata de intentar que el animal siga a los aficionados hasta que caiga o se introduzca en el mar. Rápidamente una barca con expertos la saca del agua para que no se canse y pueda seguir de nuevo con la fiesta. Los sitios más conocidos son Denia en Alicante, y Benicarló en Castellón.

En algunos lugares de Francia y Portugal también se realiza esta variedad de festejo taurino.

 

Toro de la Vega

 

La tradición del alanceamiento proviene de los antiguos juegos que realizaba la nobleza, el ejército y la realeza hace más de 1.000 años. Con este tipo de suerte han participado desde El Cid Campeador, hasta el rey Carlos V.

El Torneo consiste en la suerte en que sólo puede alancearse al toro dentro de los límites establecidos, La Vega, de forma que nadie puede molestar al toro, ni antes de entrar, ni después de salir de los límites, y que si el toro logra rebasar los límites sin que el torneante le haya alcanzado, se le dará como vencedor del torneo; que el torneo se debe celebrar en campo raso, estando prohibido cualquier tipo de vehículo; y que ambos, toro y torneante, deberán estar en igualdad de condiciones, el toro con sus defensas naturales, y el torneante, bien a pie o a caballo, provisto únicamente de una lanza.

El Toro Vega tiene lugar en Tordesillas.

 

Suelta de toros

 

Esta modalidad consiste en la suelta de toros limpios o cerriles de ganaderías por las calles de los pueblos. Aquí se suelen adquirir para estos festejos toros de las más prestigiosas ganaderías, como Miura, Partido de Resina, Cebada Gago, etc… para que los rodadores pueda realizar sus especialidades con ellos. Esta suerte se realiza en prácticamente todas las Comunidades y es la que más aficionados congrega atraídos por el hierro y por la calidad y el trapío de las reses. En la Comunidad Valenciana se conocen como “bous al carrer”.

 

Concursos de vacas y toros

 

Este festejo consiste en desafiar los toros y vacas adiestradas de las ganaderías de alquiler o autóctonas. En ellos se ven realizar a estos animales grandes proezas como subir entarimados, o escaleras, o cualquier tipo de obstáculos. Esta modalidad es muy apreciada en las comunidades donde se permiten los ganaderos de alquiler. Comunidad Valenciana, Aragón, Cataluña, Navarra, País Vasco y La Rioja.

Concurso de roscaderos

 

Esta suerte es propia de Aragón y consiste en que una cuadrilla de cinco valientes, dentro de un círculo pintado en la arena, aguante la embestida de una vaca, durante 3 minutos, varias veces sobre una gran cesta de mimbre adecuada para ello. Quien más embestidas consiga sin ser derribado será el ganador del concurso. Se cree que esta suerte se empleaba para cazar a los toros, así los paraban y el resto de los cazadores se echaban sobre la res para cogerla.

La herramienta utilizada en esta suerte es un cesto de mimbre fabricado a mano por artesanos que cultivan su propia mimbre. El mimbre se puede podar a partir de los 6 años de edad, de diciembre a febrero y en luna menguante para posteriormente fabricar el roscadero.

Concurso de recortes

 

En los concursos de recortadores se miden las capacidades y el valor de los participantes y su saber hacer con las distintas suertes que realice, como saltos de todo tipo, quiebros variados, o recortes. En este espectáculo, los recortadores se enfrentan a toros con trapío y con los pitones en puntas.

Las suertes más populares son, el recorte, el corte, también lo son los distintos tipos de quiebros, como el de cara, el de espalda, el del paso atrás, el de rodillas de cara, el de rodillas de espalda. En saltos también existe una gran variedad, el salto a pies juntos, el del ángel, el mortal, el del tirabuzón…

Los concursos de recortadores nacieron en los años 80 en Castilla y León, más concretamente en Medina del Campo, donde se le denominaba concurso de Cortes y se realizaba con novillos. Posteriormente se trasladaron a algunos pueblos de Madrid, como Arganda, pero con el mismo formato. Fue en la plaza de toros de Castellón, a finales de los 90, cuando se configuró el actual formato de recorte libre.

 

Concurso de anillas

 

Este es un espectáculo donde los recortadores suelen competir por parejas, normalmente ante una vaquilla asignada por sorteo, con el objetivo de colocarle anillas en las astas o pitones al animal. Resulta vencedora la pareja que más anillas coloca en el período de tiempo de tres minutos). Esta suerte taurina es habitual en toda la ribera del Ebro, desde La Rioja hasta el Delta, pasando por Navarra y Aragón. También tiene gran aceptación en Madrid y Valencia, de donde proceden buena parte de los recortadores más destacados.

Esta modalidad nació a finales de los 70 en Aragón, y de mitad de los 80 y la década de los 90 el circuito de concurso de anillas se extendió a lo largo de toda la geografía nacional siendo más de 100 los concursos realizados cada temporada, principalmente en Aragón, La Rioja, Navarra, Comunidad Valenciana y Comunidad de Madrid.

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