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Las corridas de toros se van forjando poco a poco como espectáculo hasta adquirir entidad propia. Aunque los primeros matadores surgen en el último tercio del siglo XVII, no se tiene referencia de ninguno de ellos hasta el siglo XVIII. El primer matador con cierta fama del que se tienen noticias es Francisco Romero, pero quienes verdaderamente asientan las bases de este arte a finales del siglo XVIII son Joaquín Rodríguez Costillares, José Delgado Pepe-Hillo y Pedro Romero. La culminación de esta etapa primitiva del toreo llega con Paquiro por su aportación en la organización de las corridas de toros, al proponer normas que, desde entonces, han permanecido vigentes.

Después de Paquiro se llega, en la historia del toreo, a Francisco Arjona Guillén, conocido popularmente como Curro Cúchares, y a José Redondo El Chiclanero. Estos dos toreros dominan una época brillante del toreo. La huella que dejo Cúchares en la fiesta de los toros no es tanto por su arte, sino por la permanencia de sus innovaciones

La primera edad de oro del toreo llega con Lagartijo y Frascuelo a finales del siglo XIX, que es cuando El Guerra da un paso más allá al acercarse al toreo en redondo. Tras la retirada de El Guerra llegan dos grandes figuras: Bombita y Machaquito, a principios del siglo XX, y que supone la transición hacia la Edad de Oro del Toreo, con Joselito y Belmonte. Con este último nace el toreo tal y como lo conocemos hoy día, de mayor quietud y arte. 

La denominada Edad de plata del toreo va desde la muerte de Joselito, en 1920, hasta la Guerra Civil. Las figuras más destacadas de este tiempo son Rafael El Gallo, Manuel Jiménez Chicuelo, Manuel Granero, Marcial Lalanda, Domingo Ortega, Ignacio Sánchez Mejías…

Con Manolete, después de la Guerra, se consolida el toreo moderno, que prácticamente llega hasta nuestros días. Hasta entonces, ha habido revolucionarios como El Cordobés, y grandes figuranes como Ordóñez, Puerta, Camino, Viti… Y de ahí, a los toreros de hoy, como Paco Ojeda, Espartaco, Ponce, El Juli, José Tomás o Morante, los últimos grandes toreros de la época.

 

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